Y la vida comienza una vez más...







Mucho hace que la vida ha pasado,sin pausa,sin ritmos, sin sentir ,desde que me alejara de mi misma.
Tiempo que no ha pasado desapercibido puesto que con sus altibajos ha mermado, moldeado mi carácter  y mi existir.

La vida, siempre tan sigilosa,tan rápido y aprensiva...la vida, la misma que me dieron al nacer.
Es ella quien ahora, en pleno 2020, me tiene atrapada, en pausa, y sin ritmo vital , por pura necesidad o exigencia.

Nos ha traído, a la humanidad en pleno,un mortal virus que ha marcado un antes y un después para la eternidad.

Trajo en su trayectoria, un elemento vivo, minúsculo pero poderoso que tiene al hombre replegado, confinado,clausurado en su propia casa, en su propio planeta.Un virus que llegó de la nada,silencioso, rápido,guerrero,mortal y conquistador de almas inocentes que ,muchas, han pagado un precio muy alto con sus vidas.Un precio injusto y ajeno a sus voluntades.
De nada sirven los ruegos, las creencias, los propósitos porque este ser "vivo" está destruyendo el don más preciado y grande que hombre alguno recibiera al venir al mundo.

El hombre, arrogante,orgulloso y altanero que creía que era el dueño de la inmensidad, que había llegado más lejos que la misma existencia, más allá que ningún dios,más allá de la luna, más allá del universo...


Y he aquí que  se nos ha parado la vida, se nos ha parado el mundo.Encerrados en nuestros mundos internos,con la mirada hacia el cielo y lo desconocido, suplicantes ante esta adversidad, observamos cómo nuestro planeta se regenera, se limpia,se crece, respira y descansa de la mala influencia de la modernidad y ambición del humano.

El planeta, nuestro planeta, no es sólo nuestro; no es de nuestra sola propiedad.En el viven otros seres en el mar, en el cielo,en la tierra que ,también reclaman su derecho a existir , convivir con los humanos quienes han matado,disminuido,ensuciado sus hábitat en su provecho como si de un dios o dioses fueran  merecedores.



Este virus ha venido para quedarse y recordar al hombre que sólo es una  mota de polvo viviente en esta gran inmensidad llamada planeta tierra.

Y así este globo terráqueo se auto -limpia de enemigos tan destructivos como el propio hombre.
Era necesario este lapsus en la historia,en la humanidad y en la vida misma  para comprender que todo tiene un porqué y que cada ciertas décadas, en planeta se resetea en  su propia defensa,en  su propio derecho.

Aprende hombre a respetar este gran legado que recibiste al nacer y protégelo como a ti mismo porque sólo eres un elemento más de este maravilloso universo llamado mundo.








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