El poder de la fe
El poder de la fe...
“Cuando llegaron al gentío, vino a él un hombre que se arrodilló delante de él, diciendo: Señor, ten misericordia de mi hijo, que es lunático, y padece muchísimo, porque muchas veces cae en el fuego, y muchas en el agua. Y lo he traído a tus discípulos, pero no le han podido sanar.
Respondiendo Jesús, dijo:
¡Oh, generación incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo he de estar con vosotros? ¿Hasta cuándo os he de soportar? Traédmelo acá. Y reprendió Jesús al demonio, el cual salió del muchacho, y éste quedó sano desde aquella hora.
Viniendo entonces los discípulos a Jesús, aparte, dijeron: ¿Por qué nosotros no pudimos echarlo fuera?.
Jesús les dijo:
Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza , diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible” (San Mateo, 17: 14 a 20).
Eliana Artiaga Soria
“Cuando llegaron al gentío, vino a él un hombre que se arrodilló delante de él, diciendo: Señor, ten misericordia de mi hijo, que es lunático, y padece muchísimo, porque muchas veces cae en el fuego, y muchas en el agua. Y lo he traído a tus discípulos, pero no le han podido sanar.
Respondiendo Jesús, dijo:
¡Oh, generación incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo he de estar con vosotros? ¿Hasta cuándo os he de soportar? Traédmelo acá. Y reprendió Jesús al demonio, el cual salió del muchacho, y éste quedó sano desde aquella hora.
Viniendo entonces los discípulos a Jesús, aparte, dijeron: ¿Por qué nosotros no pudimos echarlo fuera?.
Jesús les dijo:
Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza , diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible” (San Mateo, 17: 14 a 20).
Eliana Artiaga Soria