Dulce amor lejano





Es extraño, ¡yo no te conozco!

Pero sueño con dunas,

Pechos de una patria

Que dan vida a una esperanza

Albergada en mi alma confusa.

Mi corazón se ha lanzado

Para abrazar tu lema,

Las lágrimas de tu piel que llora

Ríos secos de olvido

Que en tu fuerte exhalación

Danzan misteriosos.

Tus ojos miel me hechizan

Y puedo sentir tu mirada

Aún en la negra noche

Que algún día puso color

En mis genes ya desteñidos.

Dame tu mano, madre sollozante,

Le pondré letra a tu canción,

Y haré que Libertad cante

Hasta que caigan los muros,

En una sedición amorosa

Que dispara besos desde mi alma

Aunque no te conozca,

Aunque tenga que esperar

Por siempre un abrazo

Sin explicación deseado,

Hasta que pueda ir a tu casa,

Y con mis pies en tu piel

Sentir la emoción del verso

Que imprimen tus primeros pasos.

Germán Castro R.Top

Comentarios

Entradas populares de este blog

Bailando bajo la lluvia.Cuento sobre la actitud resiliente

Monólogo campesino

Y la vida comienza una vez más...